11 de octubre de 2006
Supongo que el PSOE presenta a BONO a la alcaldía de Madrid buscando el voto de las señoras de la calle de Serrano. De otra forma no lo entiendo. La derecha cutre madrileña ( la versión provincial es aquella que se hace llamar nacionalista) se la tiene jurada a don Alberto, un político al modo europeo tan escaso en nuestra tierra como el agua de la lluvia. Escaso en la derecha, digo ( y en bastante izquierda).
Bono es un cristiano socialista, o un socialista cristiano, según sus propias palabras. Pero Bono, por encima de todo, es un demagogo (igual es que la demagogia va implícita en los socialistas creyentes, pero no quiero ser malvado) que lleva todo su discurso a un populacho de charanga y pandereta donde las damas del comité nacional de salvación se dan de besos con los pobres de la tierra.
Siente a un pobre a la mesa estas navidades sería un buen lema para la campaña de BONO.
Con Izquierda Unida desaparecida en combate, el dilema BONO/GALLARDON es para mear y no echar ni gota, como dicen en mi pueblo.
También indica el nivel de deterioro de la izquierda española que ya sólo entiende su discurso a golpes de publicidad en televisión y encuestas.
¡Qué asco!
1 comentario
Mnemosine -